Pero dicho esto, he relegado las Raspberries a las teles porque aunque siguen siendo más baratas, comienzo a estar fatigado de sus peculiaridades. Sorprendentemente, quizá la principal es que los "PC compatibles" de 1981 son la plataforma para computación general más "accesible" (si bien no exactamente abierta) que hay.

(Es decir, el soporte de Linux comienza a ser decente, pero siguen siendo RARAS.)

Pero quizá el problema es que el hardware sigue siendo raro. Al menos en la 5 le han puesto un reloj, cuya falta me había tocado la moral en ocasiones. Pero recuperando la 4 para conectarla a la tele... ¿Micro HDMI, en serio? (Los protocolos de pantalla por USB-C no me hubiesen aportado, en este caso, pero cada día me gustan más.)

De alguna manera he acabado con tres mini PC chinos (dos N100 y un i9) en seis meses y aunque tampoco es que sean ideales, de momento es refrescante su "normalidad".